Parejas de cumbiamberos de El Gallo Giro, vestidas de blanco como la mayoría de los asistentes a la ceremonia, hicieron una calle de honor en el momento más sublime de la celebración.
EL HERALDO. Lunes, 4 de diciembre de 2006
Aproximadamente tres mil personas se dieron cita el sábado en la Catedral Metropolitana María Reina para celebrar la apertura del Año Jubilar que se extenderá hasta noviembre del próximo año con ocasión de los 75 años de la Arquidiócesis de Barranquilla.Como preámbulo a la eucaristía, el Arzobispo Rubén Salazar Gómez, acompañado de sus obispos auxiliares realizó el rito de la apertura de la puerta principal antes de iniciarse la eucaristía.El acto fue simbolo de que Cristo es la puerta que abre para los creyentes la entrada luminosa a la celebración de este año jubilar, “un año para vivir en la fraternidad el valor de la justicia”, manifestó monseñor Salazar Gómez.
La solemnidad que se vivió en la celebración litúrgica fue espléndidamente matizada con las intervenciones del Coro Arquidiocesano que, bajo la dirección de la licenciada Ángela Marín, interpretó la mayor parte de los cantos de la misa con ritmos folclóricos del Caribe colombiano. A todos emocionó el momento en que veinte parejas de la cumbiamba El Gallo Giro hizo calle de honor a las especies –hostias y vino- que se llevaban al altar.“Fue una forma exquisita de mezclar la solemnidad de la celebración con lo autóctono de nuestra región. No podemos alabar a Dios, dejando a un lado nuestras raíces caribeñas”, dijo Maritza Ortiz, una de las fieles que participó de la celebración de hora y media que se transmitió en directo por Telecaribe y la emisora Minuto de Dios.
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